El cultivo de marihuana CBD en invernaderos es un método bastante eficaz para conseguir buenos resultados, y es que combina las ventajas del cultivo en exterior con aquellas en interior, por lo que les aporta a las plantas un entorno ideal y bien protegido para desarrollarse. Y en este artículo te contamos todas las claves para cultivar marihuana CBD en invernaderos.
Tabla de Contenidos
ToggleRazones para cultivar marihuana CBD en invernaderos
Como adelantamos anteriormente, el cultivo de marihuana CBD en invernaderos puede ser bastante interesante siempre que existe la posibilidad con respecto a hacerlo en un armario de cultivo o en el jardín. Vamos a repasar los principales puntos positivos de hacerlo en comparación con otros métodos:
Permite extender la temporada de cultivo
La temporada de cultivo puede ampliarse hasta el otoño y el invierno solamente aportando más luz a las plantas durante los días nublados, y progresivamente aumentando el tiempo en que las luces están encendidas para poder compensar esa bajada de horas de luz diurna.
De igual manera, si deseas iniciar un nuevo cultivo antes de que se termine el invierno, tienes la opción de instalar una lámpara de baja potencia y lograr complementar la iluminación natural.
Brinda el microclima ideal para el cultivo
El ambiente que se encuentre en un invernadero para cultivar marihuana CBD conserva una temperatura promedio más elevada en el campo o los jardines abiertos. A su vez, durante las estaciones frías y cálidas, dicho invernadero podrá enfriarse o calentarse.
Incluso sin la presencia de un sistema de calefacción o refrigeración, un invernadero podrá brindar un rango más consistente de temperaturas mínimas y máximas, sin condiciones que sean altamente cálidas y secas que son normales en los cuartos de cultivo en interior. Básicamente, tener microclima más uniforme se traduce en plantas sanas y cosechas bastante abundantes.
Permite conseguir cosechas a lo largo de todo el año
El clima de interior que presenta un invernadero se puede controlar fácilmente, por ejemplo, con abrir las ventanas o instalando ventiladores. Y debido a que las paredes de los invernaderos conservan la humedad y el calor en su interior, es posible cultivar a lo largo de todo el año. Precisamente este control del clima y la exposición a la luz es algo que no se puede garantizar en un cultivo tradicional en exterior.
Y dado que las paredes de los invernaderos mantienen la humedad y el calor en el interior, se puede cultivar durante todo el año. Este control del clima y la exposición a la luz es algo imposible en un cultivo normal en exterior.
Cosechas más uniformes
Conforme pasa el tiempo, las cosechas en un invernadero cada vez son más uniformes, tanto en calidad como en cantidad. Por este motivo es que la mayor parte del cannabis CBD se cultiva en invernaderos.
Es energéticamente más eficiente que un cultivo en interior
Debido a que los cultivadores aprovechan la luz natural del sol, el cultivo en invernaderos resulta más eficiente desde un punto de vista energético. Además, es bastante eficiente porque se gasta más electricidad en un cuarto o armario de cultivo.
Garantiza protección ante las inclemencias del tiempo
A diferencia de un cultivo en exterior, un invernadero protegerá a tus plantas de los cambios climáticos. No hay peligro de que la lluvia o tormentas puedan dañar tus plantas. A su vez, un invernadero va a impedir que animales se alimenten de las plantas.
Mantiene la discreción
Un invernadero permite cultivar de manera discreta, y es que tus plantas estarán seguras de ser vistas fácilmente, por lo que podrás dormir con la tranquilidad de que evitarás ladrones y actos vandálicos.
No es costoso
Para tener un invernadero no es necesario gastar grandes cantidades de dinero; uno sencillo cuesta bastante poco, y hará un trabajo bastante eficiente a la hora de alojar a tus plantas. Construir tu propio invernadero será una opción muy económica.
Y es que preparar un cultivo básico con luz natural y el respectivo riego a mano, no va a ser necesario que compres herramientas de cultivo adicionales que sean costosas.
¿Cómo cultivar marihuana CBD en un invernadero?
En general, el cultivo de marihuana CBD depende de diferentes variables que deben estar bajo control, y no es diferente en el caso de un invernadero. Eso sí, en este caso debes tener en cuenta las distintas metodologías del cultivo en interior y exterior. A continuación, detallamos una lista de los pasos que deberás seguir para asegúrate de tener un cultivo en invernadero exitoso:
Elige la cepa adecuada
Las cepas de marihuana se diferencian entre ellas por su forma de crecimiento y necesidades. Para elegir la mejor opción hay diferentes variables a considerar, y aquí te doy algunas claves:
Semillas autoflorecientes
Esta variedad es ideal para los cultivos de luz natural, y es que no requieren de un programa de luz fijo para poder crecer y florecer, y es que las variaciones en su exposición de luz solar no le perjudicarán, como en el caso de las plantas feminizadas fotodependientes. Y para el contexto de un invernadero es ideal, pues te da la libertad de plantar y cosechar en cualquier época del año siempre que les des los cuidados necesarios.
Semillas Feminizadas
La marihuana fotoperiódica feminizada también la podrás cultivar en un invernadero, pero en este caso existen ciertas limitaciones, en especial si se usa únicamente la luz natural. Esto se debe a que estas cepas florecen de acuerdo con las horas de luz que reciben, por lo que vas a tener que depender de las estaciones naturales para lograr favorecer el crecimiento y estimular su floración.
Planifica el marco temporal del cultivo
En caso de que la luz natural sea la principal fuente de energía en tu invernadero, es importante que planifiques la duración del cultivo en consecuencia.
En este caso, lo ideal es que empieces el cultivo tan pronto como las horas de luz diurnas y temperaturas empiecen a incrementar en la primavera.
Si bien el invernadero no tiene una temperatura más alta con respecto al exterior, tendrás que esperar hasta que no exista el riesgo de que se produzcan heladas antes de que alojes tus plantas en esta estructura. De acuerdo con la ubicación y el clima en la zona, esto podría darse a principios o finales de la época de primavera.
Germina en interior
De acuerdo con el punto anterior, siempre podrás germinar las semillas en interior, comenzando a estimular las plantas utilizando las plantas con lámparas CFL de baja potencia para garantizar esa ventaja inicial. Para esto no es necesario que cuentes con mucho espacio, y las luces CFL normalmente no consumen mucha energía.
De este modo, incluso si el resto del cultivo se realiza bajo luz solar, vas a poder sacar el máximo partido a la temporada de cultivo en exterior.
Lleva las plántulas al invernadero gradualmente
Tan pronto como tus plantas se encuentren un poco más grandes y fuertes, pasadas alrededor de una o dos semanas, vas a poder trasladarlas gradualmente a este nuevo hogar que será el invernadero.
Tendrás que hacerlo con cuidado y no sacarlas repentinamente de ese ambiente acogedor del interior. Por ello podrás colocarlas en el invernadero por un par de horas al día, e ir aumentando el tiempo que pasan dentro de él durante esas primeras semanas.
De esta manera vas a reducir el estrés y las plantas seguirán desarrollándose sin ningún problema. Las plantas son bastante sensibles, sobre todo en esta etapa, por ello, no es recomendable que utilices el invernadero como excusa para actuar de manera negligente.
Complementa la iluminación en función del clima
Una de las ventajas principales que tienen los invernaderos de cultivo de marihuana CBD es que te dan la posibilidad de complementar la iluminación natural con luces de cultivo extras.
Gracias a esto, los periodos de mal tiempo/nublados se podrán afrontar sin que debas preocuparte porque lleguen a afectar a las cosechas, además de que el consumo eléctrico será mucho más bajo que en cultivos de interior.
En caso de que cultive en una región con un clima apropiado y bastante sol, esta iluminación adicional podría no ser necesaria, pero claro, siempre podrás aprovechar una lámpara de cultivo a la mano.
Usa persianas o lonas para fomentar la floración
Los invernaderos te dan la opción de forzar esa etapa de floración en el cannabis a través de técnicas de privación de luz. Para oscurecer el ambiente, tienes la opción de instalar persianas con temporizadores, aunque unas cortinas opacas también van a funcionar bastante bien, y las encontrarás por un precio más reducido y aplicarás menos esfuerzo.
Además, no sólo permitirán que tus plantas florezcan en cualquier momento, sino que las cubiertas opacas servirán para prevenir la contaminación lumínica,
Además, no sólo permitirán que tus plantas florezcan en cualquier momento, sino que las cubiertas opacas servirán para prevenir la contaminación lumínica, un aspecto que podría interferir en la floración de plantas fotoperiódicas feminizadas.
Otros consejos para cultivar marihuana CBD en invernaderos
Con todo lo que hemos comentado anteriormente podrás garantizar un buen cultivo y cosechas bastante prósperas. Pero además de esto, tenemos otros consejos para ti que te ayudarán bastante:
Cuida la temperatura
A diferencia de un armario o cuarto para cultivo, las temperaturas en los invernaderos pueden fluctuar. Por ejemplo, un invernadero que está bajo la luz directa del sol podrá alcanzar unas temperaturas mayores a las que tus plantas pueden tolerar.
La instalación de un termómetro básico te va a brindar una lectura constante para que puedas tomar la decisión sobre si tus plantas requieren de calefacción o refrigeración adicional.
Instala un ventilador
Ese ambiente cerrado que hay en un invernadero podrá hacer que la humedad de eleve, y esto podría favorecer a la aparición de moho.
Por el contrario, asegúrate de que tu invernadero cuente con aberturas que permitan la ventilación, para disminuir en este sentido el riesgo de moho. Un ventilador de pie que genere una delicada brisa en la dirección de tus plantas va a mantener la humedad a raya y va a impedir que se formen áreas calientes o húmedas.
Planifica el espacio
En un invernadero, hay un espacio de cultivo limitado, por lo que deberás planificar de antemano el número de plantas que vas a cultivar.
Lee muy bien las descripciones de las cepas para tengas clara cuál será la altura final que tendrás que esperar de tus ejemplares, y sobre todo, evita aquellas espigadas como las Haze puras.
Como tip adicional, puedes aplicar el método SOG (mar de verde), el cual consiste en cultivar varias plantas pequeñas juntas (en lugar de pocas plantas grandes), una estrategia ideal para los invernaderos pequeños.
Riega correctamente
Los invernaderos te dan la posibilidad de ser flexible en la manera de cultivar. Podrás hacerlo de manera tradicional, con varias macetas y un riego manual, o puedes elegir entre una gran diferentes sistemas de riego, como el sistema de riego por goteo, nebulización, o por una operación de cultivo totalmente automatizada.
Protege el invernadero
Tu invernadero podría despertar la curiosidad y probablemente atraer una atención que no deseas. En caso de que la estructura esté a la vista de los vecinos fisgones, unas paredes opacas van a permitir la entrada de luz, pero no evidenciarán la existencia de tus plantas. Puedes emplear una alarma antirrobo y cámaras, o también mantener las puertas del invernadero cerradas, esto te dará cierto nivel de seguridad.
Mantén la limpieza
La suciedad atrae plagas y demás enfermedades, por ello es fundamental que mantengas tu invernadero limpio en todo momento.
Ten la costumbre de recoger todo tipo de residuos (normalmente serán hojas caídas), ya que estos desechos pueden crear un espacio ideal el desarrollo de hongos, moho y plagas. Debes prestar atención a estos pequeños detalles.
En conclusión, el cultivo de marihuana te ofrece lo mejor de ambos mundos, tiene muchas ventajas y hay muchas razones convincentes que al paso de las semanas verás los buenos resultados de un cultivo próspero.